Muy buenos días yoguis!!
Cómo habéis terminado la semana? Para los que me seguís por las redes sociales y habéis participado en el reto #2015Yogui, que tal? Habéis hecho los «ejercicios» que hemos ido compartiendo cada día?

La verdad es que ha sido una semana diferente, este tipo de tareas que, a priori, parecen sencillas pero que a la hora de hacerlas te das cuenta de que cuestan mucho más de lo que parecen, te hacen ver la realidad de tu autoestima, del amor y el respeto que te tienes a ti mismo y que conste que solo por el hecho de intentar hacerlas, ya estás dando un paso hacia delante, así que mi enhorabuena a todos los que las habéis llevado a cabo.
Solo espero que vuestras conclusiones sean constructivas y positivas, que os sirvan para mejorar como personas y para conoceros un poco mejor.

Personalmente estoy sorprendida gratamente, ya que aunque aún queda trabajo y aspectos por mejorar, soy consciente de que hace unos años, o incluso meses, no hubiera hecho todo y estoy segura de las sensaciones hubieran sido muy distintas ( bastante peores).

Y aquí es donde quiero romper una lanza en favor de las redes sociales. Estoy convencida de que el hecho de compartir a diario mi experiencia con el yoga me ha ayudado mucho a vencer mis complejos físicos y mi timidez ante los demás, en definitiva, a mejorar mi autoestima.
Para mí las redes sociales son como todo en esta vida, buenas si se usan bien y malas si se usan mal.
Está claro que no puedes abrirte sin tapujos al mundo, hay que tener intimidad y vida propia. También está claro que tienes que saber que todo lo que se publica pasa a estar fuera de tu control, por lo que tienes que estar muy seguro de lo que pones.
Pero también son una herramienta que te permite conocer a gente maravillosa de cualquier parte del planeta, que te enseña día a día nuevos conceptos e ideas, nuevas formas de vivir, en definitiva, con información bien escogida, te enriquecen como persona.
Así que, en mi caso, me han ayudado y por eso os animo a hacer de las redes sociales ( la que sea) unas aliadas, una herramienta más para continuar el camino del autoconocimiento del cual ya disfrutamos con el yoga.

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Os recuerdo los ejercicios que os he ido proponiendo a lo largo de la semana, así , si queréis, los podéis repetir dentro algún tiempo, si creéis que os viene bien, a todos nos viene bien de vez en cuando.

El lunes os invite a miraros en un espejo, del tamaño que fuera, para observar cómo sois. Lo ideal, creo yo, es hacerlo sin maquillaje de ningún tipo y a ser posible desnudos. La intención tiene que ser la de observarnos tal cual somos. Memorizando nuestras marcas, arrugas, pecas, etc. Aceptando cada curva, cana, cada cicatriz.

El martes os propuse escribir en una pequeña libreta las cosas que más nos gustan de nosotros mismos, tanto físicamente como emocionalmente. Centrándonos en lo positivo. Siendo honestos y realistas, sin pasarnos ni quedarnos cortos.
Este tipo de libretas donde podamos desahogarnos de vez en cuando ya sabéis que os las recomiendo precisamente pasa eso, para soltar en ella nuestras emociones, tanto buenas como malas.
Eso sí, pienso que es algo que tiene que ser muy personal, por lo que os recomiendo que las guardéis muy bien y que no las vayáis enseñando a todo el mundo. Creo que si son compartidas pierden el valor que se merecen y no es que sea un secreto, pero si es algo nuestro que debemos respetar.

El miércoles os anime a grabaros en vídeo para así ver cómo nos movemos y gesticulamos y, sobre todo, oírnos! Se, por experiencia, que escuchar nuestra voz es raro no, lo siguiente! No nos suele gustar, ni siquiera nos reconocemos. Pero es así como somos y es hora de aceptarnos tal cual.
Yo lo hice y de paso me anime a usar Snapchat, otra red social de fotos y vídeos que desaparecen a las 24h. y que hasta el miércoles solo usaba para seguir a otras personas. No sé si la seguiré usando o no, pero por si os interesa allí me llamo blancabzyogui .

Ayer jueves reflexionamos sobre cuánto tiempo de calidad y real nos dedicamos a nosotros mismos. Descanso, cuidados físicos, meditación, lectura, etc. Ese tiempo que nos da la calma y la paz necesaria para equilibrar nuestro día a día.
Ya sabéis que unos minutos al día es suficiente pero, lo hacemos? y es tiempo de calidad?

Por último, hoy viernes toca hacer balance de lo experimentado con todas estas experiencias creadas durante la semana.
Intentando ser objetivos, sinceros y no emitiendo juicios innecesarios. Valorar nuestro grado de amor y respeto por nosotros mismos, sin caer en el egocentrismo y sin ser excesivamente benevolentes para cómo nos ven los demás.
Es complicado, más de lo que parece, pero es indispensable si queremos avanzar en la vida con seguridad y confianza. Sabiendo que si nos equivocamos sabremos reaccionar y buscar una solución, sabiendo que ya somos perfectos en nuestra imperfección.
Agradeciendo el mero hecho de estar vivos, de tener cada día una nueva oportunidad de aprender y seguir creciendo como personas, para así dar lo mejor de nosotros mismos.

Y todo esto no son frases hechas, no es una utopía inalcanzable, es como debería ser la vida de cada persona, única, intransferible y maravillosa!
Es como deberíamos sentirla.

Aunque como precisamente se que es difícil y que a veces nos complicamos más de lo necesario, recordarlo de vez en cuando con estas pequeñas pautas, no nos vendrá mal.

Espero que hayáis disfrutado la experiencia de esta semana y que hayáis seguido practicando las asanas que tocaban.

Os deseo todo lo mejor para este fin de semana, que en España es puente, no sé si en Latinoamérica también, por el día de la Hispanidad.

El lunes vuelvo por aquí con más asanas de la primera serie de Asthanga yoga, mientras tanto que disfrutéis del finde y muchas gracias por estar ahí cada día!

Un saludo
Blanca